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FEBRERO 2020
Numerosas son las ocasiones en las que tenemos ganas de hacer un plan, pero no lo hacemos porque no tenemos con quien. Sin embargo, muchos de esos planes puedes hacerlos en solitario, lo que te servirá para conocerte mejor y empezar a disfrutar de cada pequeña cosa que haces.
Para que empieces a conectar contigo mismo o para que sigas evolucionando a nivel personal te damos 6 planes que seguro te interesan al tiempo que te entretienen y te hacen disfrutar.
¿Te gusta leer? Aunque sea invierno, algunos días el tiempo da treguas y permite salir a disfrutar de los rayos del sol. ¿Por qué no hacerlo con un buen libro? Tanto si lees en papel como si lo haces en ebook, aprovecha tus ratos libres para desconectar, relajarte y respirar aire puro. Seguro que cuentas con algún lugar dentro de la ciudad en el que te evades del resto del mundo, incluso puede que ese lugar esté en el recinto de tu Residencia Campus. Si prefieres escuchar música, ¡la idea es la misma!
Irte de compras
¿Por qué no? Dar un paseo entre las calles comerciales de las ciudades también es una buena opción para hacer planes en solitario. De esta forma no tienes que ver las preferencias de tus acompañantes y puedes entrar a las tiendas que más te gusten, probarte toda la ropa, zapatos o complementos sin prisa y disfrutar el momento. Si no tienes ninguna tienda favorita, ha llegado el momento de recorrer las calles para echar un vistazo a los looks que te gustaría lucir.
Apúntate a clases, independientemente de lo que sea (inglés, baile, francés…), ir a una clase particular te permite marcar tu propio ritmo. El profesional no se tiene que adaptar a cada alumno, solo importa tu nivel y tu ritmo, por lo que el aprendizaje será 100% personalizado. ¡Seguro que tu motivación mejora!
Cuando hablamos de deporte, sobre todo a ciertas edades, es común que la gente opte por deportes colectivos. Sin embargo, el deporte individual tiene una serie de beneficios como el aprender cómo y cuándo actuar, siendo autosuficiente y responsable de tus propias decisiones. Al ir a correr solo, por ejemplo, tendrás que aprender a motivarte y mantener la actitud correcta durante toda la sesión. ¡Márcate tu propio ritmo!
Puede que ayudar a los demás te aporte satisfacción y bienestar. Eso sí, solo tú puedes tomar esta decisión y para ello tienes que tener claro que quieres hacer voluntario, el tipo de voluntariado y valorar tus inquietudes y capacidades. Si quieres sentirte útil para la sociedad, poner a prueba tus capacidades, conocer al resto de la sociedad, puedes aprovechar e iniciar esta andadura.
Coge el equipaje necesario y lánzate a conocer mundo. Si ya haces planes en solitario y quieres atreverte a disfrutar más de ti mismo, aprovecha para viajar solo. El destino lo elijes tú, por lo que tomar cualquier tipo de decisión será más rápido que hacerlo en grupo.
